Bertha Sola / Bienestar en La Crónica de Hoy
La deshidratación es un proceso mediante el cual el cuerpo pierde más líquido del que se ingiere, y al suceder esto el cuerpo no tiene suficiente agua y otros líquidos para llevar a cabo sus funciones normales.
Si el líquido perdido no se repone el cuerpo se deshidrata y este problema además de ser grave, puede llegar a ser mortal.
La falta de agua en el organismo puede causar sed extrema, falta de sudoración, latidos cardíacos rápidos, respiración rápida, fiebre, delirio o inconsciencia entre otros problemas. La deshidratación puede llevar a complicaciones serias, incluyendo convulsiones, Insuficiencia renal, coma y muerte
Las causas más frecuentes que originan deshidratación son la diarrea intensa, vómitos, fiebre o sudoración excesiva, el no ingerir suficiente agua cuando hace calor o se hace ejercicio también puede causar deshidratación.
La deshidratación puede ocasionarse por enfermedades diarreicas, vómito excesivo, ciertas enfermedades, insolación o por realizar ejercicios que provoquen gran sudoración.
Entre las enfermedades diarreicas que pueden ocasionar deshidratación están: la tifoidea, la colitis, la salmonelosis y una de las más peligrosas que es el cólera o el rotavirus que también ocasionan muchas evacuaciones líquidas.
Los más vulnerables para deshidratarse son los niños, personas enfermas y ancianos.
Las señales de alarma que manda el cuerpo para indicar que está en peligro de deshidratación son:
Decaimiento, boca y lengua secas, piel seca que al pellizcarla se queda levantada, ojos hundidos y llanto sin lágrimas. En los bebés, se presenta la mollera hundida, poco o nada de orina, vómito y/o evacuaciones líquidas.
Ante las señales de deshidratación se debe:
1. Dar a beber agua, sueros farmacéuticos o Vida Suero Oral y abundantes líquidos como caldos, jugos, sopas, agua de frutas, agua mineral o té.
2. Si la deshidratación es por diarrea, se debe dar abundantes líquidos y comida a base de verduras muy limpias y bien cocidas.
3. Si la deshidratación es por insolación o cansancio, tomar líquidos poco a poco, en cucharaditas, puede ayudar.
4. Si no tiene Vida Suero Oral, prepare suero con un litro de agua bien hervida y limpia y añádale una cucharita de sal.
5. Acuda al médico para que determine la causa de la deshidratación y que pueda administrar el tratamiento adecuado.
Para prevenir la deshidratación debemos:
- Tomar todos los días entre litro y medio y dos litros de agua limpia y hervida o potable sobre todo si realiza una actividad pesada o está enfermo.
- Evitar estar al sol y hacer ejercicio durante las horas de más calor del día.
- Lavarse bien las manos antes de comer o preparar alimentos y después de ir al baño.
- Lavar bien las frutas y verduras sobre todo si se consumen crudas.
- Cocinar bien los alimentos y evitar comer o tomar agua en puestos callejeros o lugares sucios.
- Consultar al médico rápidamente cuando se presente mucha diarrea, desmayos por insolación o fiebre.
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